Ellos ven la evidencia que es invisible para el ojo común y encuentran a terroristas que pensaban que habían escapado sin dejar rastros. La Unidad de Rastreadores es uno de los activos más importantes para las FDI y las habilidades únicas de los soldados de esta unidad ha sido fundamental en la ejecución de diversas misiones de las FDI.

Un año después de la Operación Margen Protector, los rastreadores perfeccionaron su formación en estar listos para afrontar las crecientes amenazas en la frontera sur de Israel. En las últimas dos semanas, los rastreadores participaron en un amplio ejercicio de entrenamiento basado en las lecciones aprendidas durante la operación.

Durante el ejercicio, el cual fue diseñado para poner a prueba las habilidades de los rastreadores con las características únicas de la División Regional de Gaza, los soldados expandieron sus habilidades. Aprendieron cómo actuar en escenarios complejos, por ejemplo durante la búsqueda de decenas de terroristas que podrían infiltrarse en territorio israelí por sorpresa. Este tipo de persecución cambia dramáticamente, dependiendo si se trata de perseguir a un terrorista que trabaja por su cuenta o solo a un infiltrado.

A lo largo de la operación, las batallas tuvieron lugar en zonas urbanas dónde casas estaban repletas de trampas explosivas, túneles terroristas e instalaciones de almacenamiento de armas. Las infraestructuras terroristas se encuentran en medio de zonas residenciales pobladas y son inmensamente difíciles de navegar. En el ejercicio, los rastreadores de la división simularon luchar en un entorno similar y abordaron uno de los principales retos que caracterizaron los 50 días de la operación del verano pasado – los túneles terroristas.

Los rastreadores aprendieron cómo localizar e identificar túneles terroristas ocultos, así como la forma de luchar dentro de ellos. “El terreno aquí es inestable e impredecible- podrías estar pisando sin darte cuenta un túnel terrorista que está siendo excavado justo debajo de tus pies. Esta es la importancia del trabajo de los rastreadores”, explica el Myr. Suaad, Comandante de los Rastreadores de la División Regional de Gaza.

La Unidad de Rastreadores de las FDI se compone de unos pocos cientos de soldados de combate, la mayoría de los cuales provienen de la comunidad beduina de Israel y sirven en las FDI como voluntarios. Estos soldados pasan por un curso especial que los prepara para convertirse en rastreadores de la manera más completa.

 

Cada actividad operativa en la División de Gaza requiere el trabajo preventivo de un rastreador que pone a prueba el campo para buscar artefactos explosivos, infiltraciones terroristas o túneles terroristas. Cada pequeño cambio en el territorio requiere de su trabajo de investigación. A veces entran en la escena sólo para descubrir las huellas de un terrorista que ha entrado en territorio israelí. Por esta razón, es crítico que los rastreadores hagan su trabajo.

Los rastreadores establecen misiones cada día y a cualquier momento, equipados con armas, aparatos militar y sobre todo sus intensificados y agudizados sentidos. Incluso hoy en día con la tecnología avanzada, los sentidos de los rastreadores son insustituibles, sobre todo en el campo de batalla. “Yo lo llamo sexto sentido de un rastreador”, dice el Myr. Suaad. “Una persona común no puede discernir entre un cable eléctrico que en un dormitorio y uno que está conectado a un dispositivo explosivo, pero un rastreador puede y lo hará. El trabajo intrincado de los rastreadores exige la mayor paciencia, puntualidad y precisión”.

Fuente: Blog del IDF