A menos de una semana de las elecciones parlamentarias en Turquía, el presidente turco Recep Tayyip Erdogan, y los funcionarios de su partido Justicia y Desarrollo (Partido AK), han encontrado una manera particular para tratar movilizar el apoyo en las elecciones, llamando a “liberar” Jerusalem.
«La conquista es la Meca, la conquista es Saladino, es izar de nuevo la bandera islámica sobre Jerusalén; la conquista es la herencia de Mehmed II y la conquista significa poner de nuevo a Turquía de pie», expresó Erdogan en un discurso pronunciado en Estambul frente a millones de personas, que llegaron para celebrar los 562 años desde que los turcos arrebataron Constantinopla, a los cristianos europeos.
Erdogan trazó una línea histórica directa entre la conquista de Saladino de Jerusalén (que estaba en manos de los cruzados) y la conquista de Constantinopla a las elecciones en Turquía, que tendrán lugar la semana próxima. Aunque los empleados estatales fueron forzados a enviar una delegación a la celebración, bajo la amenaza de ser castigados; los medios locales informaron que muchos de los participantes se fueron durante el discurso del presidente.
Los intentos de Erdogan y sus aliados de movilizar el apoyo político mediante la vinculación de Jerusalén con el Islam han formado una tendencia clara y sólida en Turquía. Hace sólo unos días, el primer ministro, Ahmet Davutoglu, inauguró un nuevo aeropuerto en el sur de ese país, con el nombre del histórico gobernante kurdo Saladino. Según Davutoglu, «Es un nombre que le dice a algo los kurdos, a Turquía, y a los árabes, sí, este es nuestro líder”.
«Es un símbolo que nos une», añadió. «Todos los que dicen que Jerusalén es la ciudad santa de los judíos deberían avergonzarse. Elegimos el nombre de Saladino para enviar un mensaje, con la ayuda de Alá, de que Jerusalén siempre pertenecerá a los kurdos, a Turquía, a los árabes, a los musulmanes».
Según las encuestas de opinión pública, es probable que el Partido AK de Erdogan pierda la mayoría absoluta, que ha disfrutado durante los últimos doce años, en la Cámara de los Comunes, en las elecciones programadas para el 7 de junio.
Mientras Erdogan pronunciaba sus inflamatorias declaraciones; la organización islamista IHH llevaba a cabo una marcha en Estambul pidiendo la «liberación de Jerusalén», al conmemorar el quinto aniversario de la flotilla encabezada por el Mavi Mármara, que trató de alcanzar la Franja de Gaza con una carga no identificada. El barco fue abordado por comandos israelíes, cuando intentaba romper el bloqueo marítimo, al enclave costero controlado por el grupo terrorista Hamás. Nueve activistas turcos murieron en el incidente, que profundizó el deterioro de las relaciones entre Turquía e Israel.
Fuente: Aurora