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El director ejecutivo de Pfizer, Albert Bourla, detalló cómo fue que la farmacéutica se decidiera por Israel para analizar la eficacia de su vacuna contra el COVID-19.

Por: ©EnlaceJudío

En una entrevista concedida al Canal 12 israelí, Bourla dijo que era “muy apropiado para la humanidad” que se eligiera un país como campo de pruebas para la eficacia de la vacuna de Pfizer-BioNTech.

“Hablé con varios jefes de gobierno. Hablé con su primer ministro, me convenció de que Israel es el lugar con las condiciones adecuadas”, dijo Bourla, quien es un judío originario de Grecia.

Entre las condiciones mencionadas de Israel por Bourla indicó la población de tamaño menor, un “extraordinario” sistema de atención médica, un alto grado de datos electrónicos respecto a su población, una experiencia del país en el manejo de crisis por su propia historia, y finalmente lo que llamó “una obsesión” del primer ministro Benjamín Netanyahu.

“Me llamó 30 veces. Me llamaba a las 3:00 a. m.”, afirmó Bourla, indicando que Netanyahu constantemente le preguntó cuestiones y dudas sobre la vacuna. “Él me convenció francamente de que iba a estar al tanto de todo… sentí que el líder [de Israel] iba realmente que esto pasara”.

“Le apostamos a Israel. Estamos muy felices porque la forma en la que ejecutaron [la vacunación] estuvo más allá de nuestra imaginación”, declaró.

Cuando se le preguntó sobre la afirmación frecuente de Netanyahu antes de las elecciones del 23 de marzo de que solo él puede llevar vacunas a IsraelBourla enfatizó que su compañía firma contratos de suministro con Estados, no líderes individuales.

“No estamos contratando con empresas u organizaciones individuales… Las vacunas se venderán a todos los países, independientemente de quién sea el líder”, dijo.

Bourla, el hijo de sobrevivientes del Holocausto nacido en Grecia, tenía programada una visita en Israel el 8 de marzo, solo 15 días antes de las elecciones del 23 de marzo, pero la semana pasada retrasó el viaje.

“Fue bastante complicado como un viaje… en medio de la pandemia, la logística no siempre fue perfecta, así que decidimos que me quedara aquí”, dijo en la entrevista.

“Sentí que iba a ser muy glorioso si hubiera ido, en primer lugar, a un país al que amo, porque Israel para el pueblo judío es un lugar seguro, todos tenemos una conexión especial, y también para estar actualizado”, dijo.

Anteriormente se había especulado que el viaje se había pospuesto para evitar parecer que influía en el voto nacional.

Netanyahu ha promocionado repetidamente su relación personal con Bourla como una de las principales razones por las que Israel pudo obtener grandes cantidades de vacunas contra el coronavirus con tanta rapidez.

Bourla confirmó haber recibido cartas en las que le pedían que no visitara Israel antes de las elecciones para evitar usos electorales de ello, así como cartas que le decían que siguiera adelante con el viaje.

“Mi trabajo no es hacer política”, dijo, y agregó que tiene “cero intención” de interferir en las elecciones.

Bourla dijo que creía que era “una cuestión de semanas” hasta que los niños de 12 a 16 años pudieran comenzar a recibir la vacuna, pero enfatizó que depende de la aprobación de la Administración de Alimentos y Medicamentos de EE. UU. (FDA).

También dijo que cree que los estudiantes de la escuela primaria serán elegibles para la vacuna de Pfizer-BioNtech para fin de año.

Según los datos del Ministerio de Salud, más de 5 millones de israelíes han recibido la primera dosis del biológico de Pfizer-BioNTech, de los cuales casi 4 millones también han recibido la segunda. La población total de Israel es de alrededor de 9.3 millones.

Actualmente, varios millones de israelíes no son elegibles para la vacuna, la mayoría de ellos menores de 16 años.