Durante los últimos días hemos explicado el aspecto histórico de Janucá. Hoy comenzaremos a explicar brevemente los detalles de la celebración de Janucá que comienza esta misma noche.
Hoy domingo 27 de Noviembre por la noche, que corresponde al día 25 de Kislev de 5781, encenderemos la primera vela de Janucá.
Janucá se celebra por 8 días. La celebración de Janucá consiste en algunas cosas que debemos hacer y otras que dejamos de hacer.
HADLAQAT NEROT: Cada noche encendemos las velas de Janucá. Esta Mitsvá, por ser la principal, será explicada en mayor detalle durante los próximos días. Enviaremos B’H un TUTORIAL básico este domingo por la mañana.
RECITACION DEL HALEL: Recitamos el Halel durante todos los días de Janucá. Halel es una Tefila (=plegaria) de alabanza a HaShem, que consiste en la lectura y entonación de unos Mizmorim (Salmos) de Tehilim relacionados con celebración y alegría.
‘AL HANISIM: También introducimos en la Amidá (la oración diaria principal) y el Birkat haMazón (la oración después de las comidas) un párrafo especial donde agradecemos a HaShem por haberlos salvado de nuestros enemigos en los tiempos de Matitiyahu y sus hijos, los Jashmonayim.
LECTURA DE LA TORA: Durante los 8 días de Janucá leemos los textos Bíblicos correspondientes a la ceremonia de inauguración del Mishkán (el Tabernáculo, o sea, el Templo erigido en el desierto de Sinaí), cuando cada uno de los Nesiim (líderes) de cada tribu de Israel traía una ofrenda a HaShem para inaugurar el altar (mizbeaj). Durante el lunes y jueves interrumpimos la lectura de la Parashá de la semana y leemos solamente los párrafos asignados a Janucá.
Hay también algunas cosas que dejamos de hacer en Janucá, ya que son días festivos y de celebración.
Algunos ejemplos:
AYUNOS: Muchas personas acostumbran a ayunar en el día del aniversario del fallecimiento del padre o la madre. Sin embargo, cuando el aniversario coincide con Janucá, estos ayunos deberán ser desplazados.
ELEGÍAS (hesped): Se acostumbra a no realizar elegías (=darush, shloishim, discurso fúnebre) durante Janucá. Tampoco se visita el cementerio en aniversarios de fallecimiento. Estas visitas pueden ser realizadas antes o después de Janucá, según la costumbre de cada comunidad.
TAJANUN: Durante Janucá se omiten las Tefilot de confesión (tajanún) y los Mizmorim de súplicas. Todo esto, como dijimos, se hace para preservar un espíritu festivo y de alegría.
SEUDA: Si bien no existe una Mitsvá formal de realizar una Seudá, es decir, una comida celebratoria como hacemos en Purim, en muchas comunidades se acostumbra a servir comidas especiales de celebración donde se dicen palabras de Torá y se cantan canciones alegres, festejando en familia, con amigos e invitados. Muchos también acostumbran a servir platos lácteos, en recuerdo al heroico acto de Yehudit, la hija de Yojanán Cohen Gadol (ver aquí su historia, en inglés). Muchos también acostumbran a servir lebibot, sufganiyot u otros pasteles freídos en aceite.
Por: Rav Yosef Bitton