(Abed Rahim Khatib/Flash90)
Hamas

Tras varias publicaciones sobre un posible cese al fuego entre Israel y el movimiento terrorista Hamas con mediación de Egipto, el gabinete israelí se reúne este miércoles para discutir sobre el acuerdo.

Fuente: Aurora

La semana pasada el comandante del ejército, Aviv Kochavi, apoyó un posible acuerdo de cese al fuego y lo calificó como «una oportunidad» para Israel.

Por el lado del Hamas, el acuerdo involucraría la suspensión de los disturbios en la frontera, así como el lanzamiento de cohetes hacia Israel. Además, Israel estaría también pidiendo seguridades de que el movimiento terrorista interrumpa sus actividades en la zona de Judea y Samaria.

Asimismo, Israel ve en el acuerdo una forma de neutralizar aún más al movimiento terrorista Yihad Islámica Palestina y reducir su influencia dentro de Gaza.

Por su parte, Israel avanzaría medidas humanitarias y de desarrollo para la población en la Franja de Gaza.

Según informaciones publicadas en la prensa local, el acuerdo incluiría, por ejemplo, la entrada de 5.000 trabajadores palestinos de la Franja de Gaza de forma diaria a Israel. En el pasado, entraban hasta 120.000 palestinos de Gaza a Israel para trabajar, aunque desde la llegada del movimiento terrorista Hamas al poder, fue interrumpido el paso de trabajadores.

Desde Judea y Samaria ya ingresan hoy en día alrededor de 80.000 palestinos para trabajar en empresas israelíes.

Otro de los temas tratados en el acuerdo de cese al fuego sería el regreso de los israelíes que se encuentran en manos del Hamas. Estos incluyen los cuerpos de dos soldados israelíes, Hadar Goldin y Oron Shaul, que murieron durante la operación Margen Protector, así como dos civiles israelíes.

El propio canciller israelí, Israel Katz, aseguró que «no habrá ningún acuerdo sin el regreso de los cautivos».

Recientemente, la unidad de Coordinación de las Actividades del Gobierno en los Territorios, anunció que desde la Franja de Gaza comenzó por primera vez la exportación del dulce tradicional «krembo», así como de frutillas producidas en Gaza, algo que se enmarca también dentro de la mejora de las condiciones para la población local.