El ministro de Defensa y primer ministro alternativo, Benny Gantz, manifestó que mientras que el líder del grupo terrorista chií libanés Hasaan “Nasrallah es nuestro enemigo más grande en el norte, él es el problema más grande para el propio Líbano desde adentro”.
“Hemos visto el desastre que ocurrió en el Líbano. Imagínense ustedes si esto se multiplica por los alijos de armas de Hezbollah, que están en cada ciudad y en cada aldea libanesa”, apuntó Gantz a la Comisión de Exteriores y Defensa de la Knéset (Parlamento).
El ministro advirtió que la próxima guerra con Hezbollah será difícil de combatir debido a la práctica del grupo islamista chií pro-iraní de almacenar sus armas y emplazar sus misiles y cohetes en áreas civiles; en tanto que se ha concluido que la devastadora explosión en el puerto de Beirut, el 4 de agosto pasado, fue provocada por el almacenamiento inapropiado de 2.750 toneladas de nitrato de amonio, un material altamente explosivo.
“¡En el Líbano, en cada casa hay una habitación para los huéspedes y otra para los misiles: en la misma casa! Si los misiles explotan, la habitación de huéspedes no quedará entera, y la sociedad civil libanesa lo pagará caro. Como una red de seguridad, estamos combatiendo enemigos que almacenan armas y operan en entornos civiles. Si no tenemos alternativa que combatir, eso tendrá nefastas consecuencias”, afirmó el ministro.
Gantz se refirió también a la posibilidad de permitir a palestinos de la Franja de Gaza trabajar en Israel, bajo el telón de fondo del aumento de las tensiones en la zona, incluyendo el lanzamiento de un cohete, globos incendiarios y con artefactos explosivos, y un ataque perpetrado por un francotirador palestino el domingo, que no provocó heridos.
“No tenemos ningún interés en Gaza excepto la calma total y el regreso de nuestros muchachos”, en referencia a los cuerpos de los dos soldados caídos en la Operación Margen Protector en 2014, y los dos civiles israelíes cautivos en manos de Hamás en la Franja.
“Estaríamos contentos de ver Gaza florecer, y estaría alegre de ver trabajadores viniendo de la Franja de Gaza. Eso puede ocurrir con una condición: que los muchachos regresen a casa. Cuando eso ocurra, podremos abrir la Franja de Gaza”, declaró.
Con respecto a Irán, el titular de Defensa afirmó que “debemos trabajar junto con otros países para infligir un daño sobre Irán y afectar lo que allí ocurre. No podemos ignorar el peligro”.
“La presión continua sobre Irán y la acción decidida de nuestra parte hacia un embargo continuado son los principales objetivos diplomáticos. A Irán le gustaría abrir una filial terrorista en Siria y debemos evitarlo”, aseveró.