Israel quedará aislado del mundo en el caso de otra guerra con Hezbollah, aseguró el cabecilla del grupo terrorista libanés, jeque Hassan Nasrallah.

Durante un discurso televisado conmemorando la festividad chií de la Ashura, Nasrallah descargó su retórica agresiva habitual contra el Estado judío.

“Ustedes se verán obligados a cerrar sus aeropuertos y sus puertos. No encontrarán ningún pedazo de tierra en toda la Palestina [sic] que no sea alcanzada por los misiles libaneses”, prometió, añadiendo referencias específicas al Aeropuerto Internacional Ben Gurión (cerca de Tel Aviv) y al puerto de Haifa.

Israel debería saber que combatir a Hezbollah “será muy costoso en tanto que nosotros estamos más decididos, más fuertes y con más experiencia… y somos capaces de logros militares formidables”, añadió Nasrallah.

Nasrallah se refirió a las especulaciones sobre la posibilidad de una renovada guerra con Hezbollah como “amenazas”; y aseveró que “lo entiende desde una posición de fuerza y no de debilidad”.

El jeque Hassan Nasrrallah hizo una rara apariencia en el sur de Beirut para hablar ante sus partidarios de cara a la conmemoración de la Ashura.

Se trata de la sexta vez que aparece en el sur de Beirut, baluarte de Hezbollah, desde la devastadora guerra de 34 días que mantuvo esa organización extremista chií con Israel en 2006.

Hezbollah está interviniendo en la guerra civil siria, en favor del régimen del presidente sirio Bashar Assad, y en consecuencia, se ha ganado la encarnizada enemistad de la oposición sunita.

Los rebeldes sunitas sirios muestran un profundo sentimiento odio contra Hezbollah o Hizb Allah (“Partido de Dios”), refiriéndose coloquialmente al mismo en cambio como Hizb Shaytan (“Partido de Satanás”).

Fuente: Aurora