El cabecilla de la organización terrorista islámica libanesa chií, Hezbollah, jeque Hassan Nasrallah, criticó la campaña militar promovida por la coalición liderada por Arabia Saudita contra las milicias rebeldes en Yemen, diciendo que los árabes deberían unirse contra Israel y no contra las milicias hutíes, que han tomado la capital Sana y gran parte de ese país en los últimos meses.
El líder del grupo terrorista chií, que controla en gran medida al Líbano, condenó la intervención de Arabia Saudita en el Yemen, en la denominada Operación “Tormenta de la Firmeza”, a la que calificó de “sorprendente y dolorosa”.
Hezbollah, al igual que los rebeldes hutíes del Yemen, cuentan con el apoyo financiero y militar de Irán, principal rival de Arabia Saudita en la región.
Nasrallah dijo que Hezbollah estaría complacido de participar una coalición contra Israel; pero lamentó que “por décadas no ha habido una ‘Tormenta de Firmeza’, ni siquiera una leve ráfaga de viento de firmeza para combatir a Israel”.
Nasrallah se preguntó qué es lo que empujó a Riad a intervenir en el Yemen cuando “todo lo que ha ocurrido en nuestra región durante años no requirió la intervención saudita”.
“Ustedes dicen que la nueva situación en el Yemen amenaza vuestra seguridad nacional”, destacó. “¿No sienten la amenaza que representa Israel, que tiene uno de los ejércitos más poderosos del mundo?”
“Estos significa que a los ojos [de los sauditas] Israel no es un enemigo o una amenaza que requiera una ‘tormenta’”, añadió el líder de Hezbollah.
Nasrallah acusó a Arabia Saudita de abandonar al pueblo palestino, dejando la región a Israel para que “asesine y expulse y a Estados Unidos para que busque una solución diplomática ilusoria”.
“Ustedes tienen dinero, entonces ¿por qué el pueblo palestino vive en la pobreza? Este pueblo ha llamado a Irán para que lo ayude, e Irán, a pesar del bloqueo económico que se le ha impuesto gracias a ustedes, le ha dado todo lo que puede al pueblo palestino, tanto por medios diplomáticos como a través del financiamiento y las armas”.
Nasrallah negó que los rebeldes hutíes del Yemen estén siendo asistidos militarmente por Irán.
“¿Dónde están las armas iraníes en el Yemen, y donde están las bases iraníes allí?, preguntó Nasrallah.
La razón real de esta campaña, afirmó el cabecilla de Hezbollah, “es que Arabia Saudita perdió su control y dominio sobre el Yemen y el objetivo de la guerra es restaurar el control y la hegemonía sobre el Yemen. Punto”.
El secretario general de Hezbollah vaticinó que Riad sufrirá una “humillante derrota” si no resuelve el conflicto a través de negociaciones.
“A lo largo de la historia, los invasores han sido derrotados y humillados”, expresó Nasrallah. “Los gobernantes de Arabia Saudita tienen una oportunidad para no enfrentar la humillación”.
Nasrallah afirmó que los países que están participando en la campaña militar deberían revisar sus políticas. “¿Debería la región ir a la guerra por el dinero saudita?”, se preguntó retóricamente.
Nasrallah acusó también a Arabia Saudita de enviar atacantes suicidas a Irak y de haber creado al Estado Islámico. El líder de Hezbollah dijo que a Arabia Saudita que Irán ha expandido su influencia en la región porque “ustedes son unos vagos, unos perdedores y no toman responsabilidad”.
Hezbollah ha sido criticado duramente por su intervención en la guerra civil siria en favor del régimen de Bashar al Assad. Los rebeldes sunitas se refieren coloquialmente a Hezbollah (Hizb Allah o Partido de Dios) como Hizb Shaytan (Partido de Satanás).
Fuente: Aurora