Según el estudio, los niños que comieron Bamba tuvieron una incidencia 75% menor de alergias al maní .
Por Shula Rosen, United with Israel
Se ha sospechado desde hace tiempo que el apreciado refrigerio israelí de mantequilla de maní puede ser la razón de la menor incidencia de alergias al maní en el Estado judío.
La tasa de alergias al maní en Israel es aproximadamente el 10% de la de Estados Unidos, y los investigadores de todo el mundo están mirando a Israel en busca de una clave para prevenir esta peligrosa condición.
Esta intuición se ha confirmado con una nueva investigación que indica que los niños que comen Bamba tienen un 75% menos de posibilidades de experimentar una reacción adversa a los cacahuetes.
Un estudio publicado en el New England Journal of Medicine involucró a investigadores británicos y estadounidenses que siguieron a niños judíos a partir de 2008 para ver si Bamba reducía las alergias al maní.
Los sujetos del estudio fueron 640 bebés de entre 4 y 11 meses que mostraban tendencia a desarrollar determinadas alergias y la mitad de los cuales ya eran alérgicos al cacahuete.
Los grupos se dividieron además en categorías de aquellos que comieron Bamba regularmente antes de los 5 años y aquellos que no lo hicieron.
La Dra. Elee Shimshoni, que escribió sobre el estudio para Little, Big Science, explicó que a los niños israelíes a menudo se les da Bamba a una edad temprana porque «se derrite en la boca».
Después de varios años, los investigadores descubrieron que sólo el 10% de los niños que comieron Bamba desarrollaron alergia al maní, en comparación con el 35% de los que no comieron Bamba.
Un estudio de seguimiento cuando los participantes cumplieron 12 años mostró que el 15,5% de los que no comían Bamba tenían alergia al maní y solo el 4,4% de los que comían Bamba eran alérgicos al maní.
Shimshoni dijo que la suposición del estudio es que después de los 12 años, la resistencia a la alergia al maní durará por el resto de sus vidas, y agregó que podría ser necesario un estudio de seguimiento para confirmarlo.
Las alergias al maní suelen ser graves y son responsables de dificultades para respirar, hinchazón, urticaria e irregularidades en la presión arterial cuando la persona se expone al maní.
La alergia puede ser difícil de tratar ya que la legumbre se utiliza en el procesamiento de muchos productos de uso diario.
Los investigadores comentaron que cualquier tratamiento para reducir la incidencia de las alergias al maní “mejoraría la socialización de los niños y la calidad de vida de los niños y sus familias”.