El Embajador de Israel en el Danny Danon ONU criticó duramente al Secretario General Ban Ki-moon, tras su discurso en la Asamblea General de la ONU después de que el jefe de la ONU optara por criticar a Israel una vez más «en lugar de centrarse en el terrorismo palestino y en la incitación, y en vez de obligar a Mahmoud Abbas a volver a la mesa de negociaciones».
El Embajador de Israel en las Naciones Unidas (ONU) Danny Danon reaccionó ayer con dureza tras el discurso de apertura por parte del Secretario General Ban Ki-moon, en la Asamblea General de las Naciones Unidas, diciendo que sufre de una «obsesión» con Israel.
Ban centró principalmente sus palabras sobre la guerra civil en Siria, pero dejo espacio en su discurso para la crítica hacia Israel, descuidando de hacer frente a una amplia gama de temas que realmente requieren la atención de la ONU. «Diez años de expansión de los asentamientos ilegales y cincuenta años de ocupación. Esto es una locura. Los palestinos no pueden continuar viviendo bajo la ocupación israelí», declaró Ban Ki-Moon.
También acusó a Israel de «pérdida de tiempo» en la implementación de una solución de dos estados entre Israel y Palestina.
«La verdadera locura pertenece a la ONU», dijo Danon. «En lugar de centrarse en el terrorismo palestino y en la incitación, y en vez de obligar a Mahmoud Abbas a volver a la mesa de negociaciones, el Secretario General optó por criticar a Israel una vez más. Esta es una obsesión contra Israel que debe terminar».
«En un momento en el que el terrorismo palestino está en aumento en Israel, el Secretario General eligió criticarnos y pasar por alto la responsabilidad directa de Abbas y de los líderes palestinos que continúan incitando hacia el terror,» añadió Danon.
Israel ha estado experimentando una nueva oleada de ataques terroristas palestinos. Los funcionarios de seguridad israelíes estiman que el recrudecimiento de la violencia, que en realidad comenzó el año pasado, es el resultado de la incitación y del odio a los que terroristas fueron expuestos a durante la fiesta musulmana de Eid al-Adha la semana pasada.
Mientras Ban postula que la presencia de Israel en Judea y Samaria es «ilegal».
Hay que recordar a Ban Ki-Moon que Israel volvió a Judea y Samaria y unió su capital Jerusalem durante la Guerra de los Seis Días de 1967, tras una guerra que Israel no inició. Los palestinos quieren que el territorio sea su futuro estado, junto con la Franja de Gaza y Jerusalem oriental como su capital, y niegan la conexión ancestral y bíblica de los judíos a estas tierras.
Unas 120 comunidades se han construido en Judea y Samaria, ahora es el hogar de más de 400.000 judíos de Israel. Unos 200.000 judíos israelíes viven en la parte oriental de Jerusalem, que Israel anexó y considera parte de su capital eterna e indivisible.
Los palestinos, junto con parte de la comunidad internacional, ven la presencia de Israel en Judea y Samaria como ilegal o ilegítima. Afirman que el creciente número de israelíes hace cada vez más difícil establecer su propio estado en estos territorios.
Por: Max Gelber, Unidos con Israel