En el entorno empresarial despiadado, global y feroz de hoy en día, es impresionante ver la acentuación de su empresa en las causas de la justicia social como base para mantener la integridad de la marca y los valores centrales corporativos, así como para mejorar la calidad de vida a nivel local, nacional e internacional.

Se sabía que el silencio en redes de Ben & Jerry’s no iba a acabar bien. La pasada primavera, cuando estalló el último conflicto entre Israel y Hamás, la compañía heladera, que ya era woke antes de que la mayoría de la gente supiera qué era eso de ser woke, fue objeto de presiones feroces por parte del activismo izquierdista para que rompiera con el Estado judío.

Ben & Jerry's, la marca de helados propiedad de Unilever, tomó una polémica decisión que impacta directamente en el país. Según reportaron desde la compañía, decidieron dejar de comercial sus productos en "los territorios palestinos ocupados".