Varios foros internacionales de noticias, entre ellos la cadena británica BBC y la estadounidense CNN, han indignado a la audiencia de Israel por sus engañosos titulares sobre el ataque terrorista en Tel Aviv, en el que fueron asesinados cuatro israelíes.

Demostrar que la lucha contra la propaganda exige de la creación de un organismo central israelí que controle todo el campo de batalla resulta sencillo. En cambio, su establecimiento depende de la voluntad política del Gobierno para crear (con décadas de retraso) esa agencia tan necesaria y para dotarla de los fondos precisos.