(Yossi Aloni/Flash90)

El coordinador nacional de COVID-19 dice que, si el aumento de casos no provoca un importante aumento de enfermos graves y hospitalizaciones, se aplicarán pocas restricciones.

Fuente: Aurora

Las ciudades Tel Aviv, Kfar Saba y Herzliya, fueron declaradas “amarillas” debido a que se diagnosticaron un número significativo de personas con Coronavirus.

Ayer, sábado, se diagnosticaron 115 nuevos casos de COVID-19, entre ellos 18 israelíes que regresaron del exterior.

La ciudad de Binyamina-Givat Ada, al norte de Tel Aviv, sigue siendo “roja”; mientras que Modiín y Kochav Yair han sido clasificadas como “naranja”.

El fin de semana, 34 israelíes que regresaron del exterior fueron diagnosticados positivos. Nueve de ellos regresaron de Rusia. Los israelíes contagiados provenían también de Turquía, Grecia, Italia, Bulgaria, Estados Unidos y Chipre.

“La mayoría de nosotros estamos vacunados. Es posible ver la grave enfermedad y observar que no hay aumento de las hospitalizaciones, al igual que en Gran Bretaña, y tratamos de absorber el incremento de los enfermos moderados que estamos viendo. Es una consideración compleja por lo que tenemos que tomar decisiones complejas”, manifestó el coordinador de la lucha contra el COVID-19, Prof. Nachman Ash, durante una entrevista ofrecida a la emisora estatal Kan.