ÚLTIMA HORA: Esta noche (sábado por la noche), el primer ministro Naftali Bennett convocó al Comité Ministerial para hacer frente a la variante del coronavirus Ómicron.
El Gabinete ha decidido que se prohibirá la entrada de extranjeros a todos los países, excepto en los casos aprobados por un comité de excepciones.
Los israelíes que se definen como vacunados o en recuperación de acuerdo con los procedimientos del Ministerio de Salud realizarán una prueba de PCR al aterrizar en Israel, después de lo cual entrarán en aislamiento domiciliario. Tres días después de la entrada en el país, y sujeto a una segunda prueba de PCR con resultado negativo, podrá ser liberado del aislamiento.Quienes no realicen la prueba adicional el tercer día deberán completar el aislamiento completo.
Los israelíes no vacunados realizarán una prueba de PCR al aterrizar en Israel, después de lo cual entrarán en aislamiento domiciliario. Sujeto a una segunda prueba de PCR al séptimo día con resultado negativo, podrá salir del aislamiento. Quienes no realicen la prueba adicional el séptimo día deberán completar el aislamiento completo.
Los israelíes que regresaron de países definidos como rojos realizarán una prueba de PCR al aterrizar en Israel, luego de lo cual serán transferidos a un periodo breve de aislamiento en un hotel hasta que se reciba el resultado. Si es negativa podrán completar el aislamiento en casa hasta la realización de una segunda prueba a los 7 dias de la llegada.
Otra importante medida tomada por el gabinete es la utilización de los localizadores celulares operados por el Servicio General de Seguridad (GSS) para monitorear a los portadores de la nueva cepa «Ómicron», con el fin de localizar e interrumpir las cadenas de contagio.
Las decisiones entrarán en vigor mañana a la medianoche (00:00) y tendrán una vigencia de 14 días.