Mensaje del presidente Isaac Herzog alusivo al día 9 de Av.
(Comunicado del portavoz presidencial)
Anoche (lunes 12 de Agosto de 2024), el presidente Isaac Herzog, pronunció el siguiente mensaje en el marco del encuentro realizado en la plazoleta de los secuestrados en Tel Aviv, bajo el nombre de “Unidos por su retorno”:
“Oh Sión, llora amargamente por tus hijos”. Todos los años recitamos esta hermosa y triste lamentación, en el marco del servicio del día Tishá BeAv, 9 de Av”.
“Pero este año, en vísperas de Tishá BeAv 5784, mientras conmemoramos juntos miles de años desde la destrucción del Gran Templo, y también diez meses de dolor desde aquella terrible herida que nos infligieron nuestros enemigos con una crueldad monstruosa-en la mañana de Simjat Torá-parece que incluso las lamentaciones adquieren, repentinamente, un sentido diferente. Como si estuvieran escritas desde el corazón mismo de la realidad israelí actual, desde nuestros corazones doloridos, preocupados, anhelantes y ansiosos por nuestras hermanas y hermanos, mujeres y hombres, niños y ancianos, padres y bebés, que aún se encuentran en los túneles del Hamás. Sus gritos deben ser escuchados en todos los rincones del mundo”.
“Ya se ha ido toda la luz,no te vayas tú también. Ven, madre, siéntate un rato conmigo”. Estas palabras fueron escritas hace más de cincuenta años por Leah Naor, una de las fundadoras del Kibutz Najal Oz-cuyo querido, entrañable y valiente pueblo “construyó su hogar a las puertas de Gaza, a fin de que fuera un muro para nosotros”, como se decía. Palabras que uno no puede leer en estos días sin que nos conmuevan y nos griten, acerca de familias que continúan destrozadas, sobre comunidades que están fragmentadas y divididas, sobre toda una nación con un enorme agujero en su corazón”.
“El Tishá BeAv pasado, los vientos de división y separación soplaban por todos lados, amenazando con encender una guerra entre nosotros, dentro de nuestra propia casa. Los vientos de incitación, violencia y arrebatos casi provocaron la ruina sobre esta querida casa, casi enfrentaron a un hermano contra otro hermano”.
“Veo con gran preocupación cómo estos peligrosos vientos de división regresan a nosotros incluso ahora, amenazando nuestra unidad, nuestra existencia como un pueblo en un Estado”.
“Por consiguiente, aprecio este encuentro, que en su totalidad es un llamamiento a la fraternidad y a reparar los desgarros-estamos aquí juntos. Lamentamos las terribles fracturas: las fracturas del pasado, de destrucción y exilio, y las fracturas del presente, de los muchos caídos y los secuestrados”.
“Lloramos juntos, nos abrazamos juntos, y clamamos juntos por la liberación inmediata de nuestros hermanos y hermanas de la oscuridad del cautiverio, de los horrores en Gaza, de las manos de un enemigo cruel. Esta noche, gritamos juntos: ¡Tráiganlos a casa!”.
“Bendigo vuestro llamamiento compartido, hermanas y hermanos, para avanzar en los esfuerzos y emprender acciones con determinación, acciones unidas y valientes para liberar a los secuestrados; y nuestra esperanza compartida: que la próxima cumbre de este Jueves traiga buenas noticias que devuelvan a nuestras hermanas y hermanos. No será fácil ni simple. Pero las voces de la sangre de nuestros hermanos nos gritan desde las mazmorras de Gaza, los vivos y los muertos, los civiles y los soldados. No debemos quebrar el vínculo más sagrado que nos une: traer a todos y a cada uno de ellos de regreso a nuestra patria”.
“El deber de un Estado hacia sus ciudadanos es, ante todo, traerlos de vuelta a casa desde el enemigo. Con creatividad, determinación, coraje, iniciativa y con todos plenamente comprometidos.
“Reitero: apoyaré cualquier acuerdo que traiga a nuestros cautivos a casa y mantenga nuestros intereses en materia de seguridad. Me comprometo en nombre de todos nosotros a que continuaremos alzando la voz, luchando y no dejando piedra sin mover: hasta que cada uno de nuestros seres queridos vuelva a casa, hasta que sanemos y reparemos, reconstruyamos y renovemos todo lo que se ha roto en nosotros y para nosotros”
“Para terminar, me gustaría abordar los días tensos y complejos en los que nos encontramos, después de que Irán y todos nuestros enemigos en el eje del mal hayan declarado su intención de atacarnos con gran fuerza próximamente. Repito: El Estado de Israel está preparado para enfrentar esta amenaza en múltiples frentes. Tenemos capacidades militares de primer nivel. Contamos con una fuerza aérea y sistemas de defensa multidimensionales avanzados que están en máxima alerta y listos. Tenemos una inteligencia exhaustiva. Contamos con sistemas de emergencia y rescate, y un frente interno más preparado que nunca. Tenemos alianzas diplomáticas y de seguridad y asociaciones comprometidas para frustrar cualquier acción enemiga. Entre ellas, la más importante, es la potencia más fuerte del mundo—los Estados Unidos—que está comprometida con nuestra seguridad”.
“No obstante, estas capacidades de defensa no garantizan una protección absoluta. Por lo tanto, el frente interno también tiene un papel significativo en mantener la resiliencia nacional. Debemos actuar con responsabilidad, seguir las instrucciones, mantener la calma y, por supuesto, no dudar en buscar apoyo—incluso emocional. Es importante y apropiado”.
“Como nación, todos atravesamos tiempos difíciles—y es importante que nos mantengamos unidos y tengamos éxito juntos, en asociación, en hermandad y por amor a Israel. En las palabras del Rabino Abraham Isaac HaCohen Kuk: “Si fuimos destruidos y el mundo con nosotros por un odio infundado, seremos reconstruidos, y el mundo con nosotros, por un amor infundado”.