Los activistas anti-israelíes están celebrando una «victoria» en Noruega del movimiento de boicot, desinversión y sanciones.
El Ayuntamiento de Trondheim, que representa la tercera ciudad más grande de Noruega, aprobó una resolución de apoyo al boicot de los bienes y servicios producidos en las comunidades judías en Judea y Samaria.
La ciudad noruega insta a sus residentes evitar hacer negocios con empresas de propiedad judía estacionadas en los «asentamientos ilegales».
De acuerdo con la resolución, «los asentamientos ilegales se están expandiendo, la construcción del muro continúa, los palestinos están sometidos a un acoso diario y se enfrentan a grandes obstáculos en su vida diaria. Esta es una política que el Municipio de Trondheim no puede apoyar. Por lo tanto, el municipio se abstendrá de comprar bienes y servicios producidos en los territorios ocupados».
Judea y Samaria, la antigua patria del pueblo judío, fue, de hecho, liberado por el ejército israelí durante la Guerra de los Seis Días de 1967, cuando Israel se defendió de los países árabes circundantes determinados a destruir el Estado judío. Entre 1948 y 1967, la región fue ocupada por Jordania; nunca hubo un Estado palestino.
La decisión de Trondheim ha sido aclamada como una victoria para el movimiento de boicot contra Israel.
«Todo el mundo tiene derecho a expresar sus opiniones y expresar críticas sobre asuntos internacionales de interés. Sin embargo, en este caso, nos damos cuenta una vez más que el movimiento de Boicot, Desinversión y Sanciones dirigen su campaña contra Israel utilizando un doble rasero» declaró el CEO del Congreso Judío Mundial, Robert Singer el viernes en una carta al ministro de Asuntos Exteriores noruego Borge Brende.
Por: Terri Nir, Unidos con Israel