Esto no es otra cosa que un intento de asesinato por parte de niños, que por muy niños que sean, se les debe de calificar como terroristas.
Una mujer que estaba en su coche vio como dos niños palestinos le lanzaron una enorme piedra contra su coche, rompiéndola el cristal.
Por suerte la mujer tuvo la habilidad de no mover el volante y siguió su ruta, y con voz muy nerviosa llamó a su marido para contarle lo sucedido. Las fuerzas de seguridad llegaron al buscar poco tiempo después.