El vídeo muestra a niños jugando al fútbol, pero no son niños normales.
Estos jóvenes jugadores perdieron amigos y familiares cuando un cohete de Hezbolá alcanzó Majdal Shams y mató a 12 jóvenes mientras jugaban al fútbol.
Estos niños están demostrando que no van a permitir que los terroristas les impidan vivir sus vidas.
