Los terroristas palestinos están invirtiendo más tiempo y recursos en la fabricación de armas de fuego.
Algunas de estas armas improvisadas se han utilizado para matar a israelíes, entre otras a la policía de 19 años de edad, Hadar Cohen, que sacrificó su vida impidiendo un ataque masivo en Jerusalem.
Unidades especiales del ejército israelí han llevado a cabo una intensa batalla para localizar y decomisar los depósitos de armas ilegales en Judea y Samaria.
Desde septiembre del 2015, 33 personas han muerto en los ataques terroristas y más de 404 han resultado heridas.
Vea este vídeo para ver cómo los palestinos están trabajando horas extras para matar judíos.