Este invento israelí está deteniendo el déficit mundial de abejas, responsables a través de la polinización del 30 por ciento de los suministros de alimentos del mundo.
Científicos israelíes desarrollaron recientemente una colmena robótica, que evita que las abejas traigan venenos, pesticidas y enfermedades que están acabando con las poblaciones de abejas en todo el mundo.
La colmena israelí representa un gran avance para la agricultura, porque alrededor de un tercio de los suministros de alimentos del mundo dependen de la polinización de las abejas.
La colmena robótica mantiene segura a la abeja reina y protege a la colonia de una amplia gama de peligros.