Cientos de miles de ciudadanos israelíes y turistas descendieron visitaron los lugares sagrados en todo el estado judío durante la celebración anual de la Pascua.
En Hebrón, más de 25,000 personas asistieron a fiestas y oraciones y disfrutaron de la música festiva en honor de la fiesta de la Pascua, que dura siete días en Israel y atrae a visitantes de todo el mundo.
En la tumba de José en Siquem, Samaria, 1.500 fieles oraron en la tumba del amado patriarca bíblico.
Quizás lo más destacado del festival, sin embargo, fue la bendición sacerdotal anual en Jerusalem, donde más de 100,000 personas llegaron a la plaza del Muro Occidental en la base del Monte del Templo judío. Aquí, los miembros de la clase sacerdotal («cohanim») otorgaron la bendición tradicional que está escrita en la Torá a la multitud masiva reunida.