Se ha hecho historia en el Hospital Rambam en Haifa. Un paciente israelí diagnosticado con temblor agudo, una agitación constante del cuerpo, se sometió a cirugía cerebral no invasiva. Les comentamos a continuación los resultados.
Durante 15 años, Sami Zangi sufría de temblor agudo, una condición que lo dejó incapaz de escribir o beber correctamente.
Utilizando la tecnología no invasiva única puesta a disposición por la compañía israelí InSightec, la condición de Zangi fue tratada mediante un procedimiento de tres horas que produce resultados sorprendentes.
Sin cirugía física, por lo tanto no hay cicatrices, Zangi se ha convertido en un hombre nuevo.
Las contribuciones que Israel ha hecho al mundo son inconmensurables. Entonces, ¿por qué tenemos tantos enemigos?