Con un tamaño de una millonésima de milímetro, los nanodiamantes pueden recubrirse con medicamentos y enviarse al tejido corporal a través de la piel sin causar daño.
Por Abigail Klein Leichman, Israel21c
La piel es uno de los órganos más grandes y accesibles del cuerpo humano, pero penetrar sus capas profundas para tratamientos médicos y cosméticos ha resultado ser un desafío.
Investigadores de la Universidad Bar-Ilan (BIU) en Israel están enfrentando ese desafío con partículas nanométricas de diamante lo suficientemente pequeñas como para administrar dichos remedios de manera segura a través de la epidermis, la dermis y las capas de grasa de la piel.
También crearon un método óptico no invasivo basado en láser que cuantifica la penetración de nanodiamantes y determina su ubicación y concentración dentro del tejido corporal, eliminando la necesidad de una biopsia.
“Este es un avance significativo en dermatología y en ingeniería óptica”, dijo el Prof. Dror Fixler, director del Instituto de Nanotecnología y Materiales Avanzados de BIU y miembro del equipo de investigación.
“Podría abrir la puerta al desarrollo de medicamentos aplicados a través de la piel junto con preparaciones cosméticas modernas que utilizan nanotecnología avanzada”.
La investigación de Fixler, asistida por la investigadora Channa Shapira y otros, se publicó en la revista científica ACS Nano.
Los nanodiamantes, de un tamaño de una millonésima de milímetro, se producen al detonar explosivos dentro de una cámara cerrada. En estas condiciones, la alta temperatura y la presión hacen que los átomos de carbono que se encuentran en los explosivos se fusionen. Los nanodiamantes creados en el proceso son lo suficientemente pequeños para penetrar en el tejido, e incluso en las células, sin causar daño.
Miembros de la Facultad de Ingeniería y del Departamento de Química de Kofkin de BIU participaron en el proyecto.