Miles de peregrinos judíos acudieron a la Tumba de José en Nablus (Shjem) en Samaria (norte de Cisjordania), fuertemente escoltados por las fuerzas de seguridad con la intención de rezar allí, un derecho estipulado en los Acuerdos de Oslo; pero fueron atacados por manifestantes palestinos.
Los palestinos arrojaron piedras y una bomba incendiaria a un vehículo de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) que respondieron con medios de dispersión de masas, apuntó el portavoz militar.
Dentro de la Tumba, los soldados descubrieron dos artefactos explosivos, que fueron neutralizados por especialistas (artificieros).
No se registraron heridos y un palestino involucrado en los ataques contra las tropas israelíes fue detenido y derivado para un interrogatorio.
La Tumba de José está localizada en el Área A de Cisjordania, oficialmente bajo el control total de la Autoridad Palestina, aunque el ejército israelí conduce sus actividades a voluntad. Las FDI han prohibido a los ciudadanos israelíes ingresar en el Área A sin autorización previa.
En los años 2000, el líder palestino Yasser Arafat intentó convertir la tumba en una mezquita y la cúpula fue pintada de verde. Sólo bajo una intensa presión de Estados Unidos e internacional fue repintada de blanco.
El sitio es venerado por judíos, cristianos y musulmanes y a menudo se ha convertido en un punto de violencia sectaria. Usualmente, a los peregrinos judíos se les permite visitar la tumba una vez al mes, y deben hacerlo protegidos bajo una fuerte custodia militar. Durante esas visitas, sufren ataques de los palestinos que les arrojan piedras, bombas Molotov y les efectúan disparos.
En otro incidente, las FDI anunciaron que ocho palestinos sospechosos de actividades terroristas fueron detenidos anoche en Cisjordania.
Fuente: Aurora