A pesar de las amenazas de las organizaciones terroristas, cientos de israelíes bajo la escolta de las FDI ingresaron a la ciudad de Shechem (Naplusa) el miércoles por la noche para rezar en la Tumba de José.

Anoche, tropas israelíes escoltaron a cientos de peregrinos judíos hasta el ingreso al sitio donde según la tradición está enterrado el patriarca bíblico, en las afueras de la ciudad de Nablus (Shjem).

Dentro de la Tumba, los soldados descubrieron dos artefactos explosivos, que fueron neutralizados por especialistas (artificieros).

Apenas dos semanas después de que la Tumba de José fuera incendiada por palestinos, los trabajadores judíos pasaron toda una noche reparando el daño y restaurando el lugar santo para el pueblo judío.