Un residente de Gaza ingresó a Israel en enero de 2020 con un permiso humanitario como ayudante de su madre, que estaba siendo tratada en Judea y Samaria por una enfermedad grave.
Por Aryeh Savir, TPS
Las fuerzas de seguridad de Israel lograron detener a un terrorista árabe que cometió ataques incendiarios contra objetivos judíos en la ciudad de Ramla en septiembre, incluida la quema de varios sucot.
El servicio de seguridad Shin Bet declaró el lunes que su investigación conjunta con la policía condujo al arresto el pasado 12 de octubre del terrorista Suleiman Kasab, de 29 años, residente de Khan Yunis en el sur de la Franja de Gaza, que se encontraba ilegalmente en Israel.
Suleiman ingresó a Israel en enero de 2020 con un permiso humanitario como ayudante de su madre, que estaba siendo tratada en Judea y Samaria por una enfermedad grave. Después de que se hizo el tratamiento de su madre, Suleiman aprovechó el permiso y permaneció ilegalmente en Israel.
La investigación reveló que el 30 de septiembre y el 4 de octubre, Suleiman llevó a cabo ataques incendiarios en la ciudad de Ramla, ambos contra sucot y un autobús.
La investigación reveló además que las Brigadas de los Mártires de Al Aqsa trabajaron con Suleiman para promover graves ataques terroristas en Israel, incluidos secuestros, atentados con bombas y tiroteos. Se suponía que Suleiman también recibiría armas para este propósito, pero aún no había recibido los fondos de la organización terrorista antes del arresto.
La Fiscalía del Distrito Central presentó una acusación grave en su contra el lunes.
El Shin Bet señaló que este caso se suma a arrestos anteriores de habitantes de Gaza a los que se les permitió ingresar a Israel por razones humanitarias y fueron reclutados para promover ataques terroristas en Israel, incidentes que «enfatizan el potencial de la amenaza inherente a los residentes ilegales en Israel».