El primer ministro Benjamin Netanyahu respondió a las declaraciones incendiarias del presidente palestino, Mahmoud Abbas, de que Israel había matado los acuerdos de Oslo, alegando que los comentarios de Abbas ayudaron a Israel al revelar las posiciones reales de los palestinos en el conflicto.
El líder israelí siempre sacando lo bueno, aunque esta vez lo tenía difícil ya que las declaraciones del discurso de Abbas fueron realmente incendiarias, y en muchas partes del mismo, antisemitas.