Hezbolá está profundamente involucrada en la guerra civil de Siria, al norte de Israel. Y si no logran o se atreven a atacar a Israel, es posible que la organización terrorista ponga su foco en los objetivos judíos o israelíes en la Diaspora.

Después de todo lo que se ha dicho y hecho, Siria parece hoy un callejón sin salida que sólo puede resolverse en un marco de cambios globales. Y sin embargo, Hezbolá sigue luchando.

En una declaración a la Comisión de Asuntos Exteriores de la Cámara de representantes de los Estados Unidos, Adam Szubin, del Departamento del Tesoro de EE.UU. en el area del terrorismo e inteligencia financiera, afirmó que la organización terrorista Hezbolá está en problemas.

Desde la última guerra entre Israel y Hezbollah en 2006, dicha organización terrorista se ha centrado en mejorar sus capacidades tecnológicas y hoy en día es más poderosa que muchos ejércitos del mundo.

Una facción de Hezbolá informó que quiso asesinar al ex primer ministro israelí, Ehud Olmert. Un ataque que fue frustrado por un agente israelí que se había infiltrado en los más altos rangos de los grupos terroristas.

El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, no confirmó ni negó las acusaciones de que Israel haya atacado objetivos de Hitzbollá. Sin embargo, durante una conferencia de prensa conjunta con la canciller alemana Angela Merkel, el primer ministro israelí reiteró el compromiso de Israel de defender a sus ciudadanos.