En enero del año pasado la casa del vecino Jeff Schwartz apareció llena de huevos estallados contra sus paredes, meses después de que Bieber lanzara fiestas salvajes y carreras de autos en el barrio Calabasas. En la demanda, el cantante no refutó los actos de vandalismos y pagó $80.000 dólares en daños. Además fue puesto en libertad condicional.