Anti-Israel demonstrators march at the University of Berkeley. (AP/Ben Margot) (AP/Ben Margot)

La Universidad de Columbia y la Universidad de Michigan en conjunto tuvieron 90 incidentes antiisraelíes, 52 y 38, respectivamente.

Por Dion J. Pierre, The Algemeiner

La actividad antiisraelí en los campus universitarios ha alcanzado niveles de crisis en los 11 meses transcurridos desde la masacre del 7 de octubre cometida por Hamas en el sur de Israel, según un nuevo informe publicado el lunes por la Liga Antidifamación (ADL).

El informe, titulado “Activismo antiisraelí en los campus estadounidenses, 2023-2024”, revela un aumento “asombroso” del 477 por ciento en la actividad antisionista que incluye agresiones, vandalismo y otros fenómenos y pinta un panorama sombrío del sistema de educación superior de Estados Unidos, envenenado por el extremismo político y el odio.

“A medida que avanzaba el año, los estudiantes judíos y los grupos judíos del campus fueron objeto de un escrutinio implacable por cualquier asociación, real o percibida, con Israel o el sionismo”, dice el informe. “Esto a menudo condujo al acoso de los miembros judíos de las comunidades del campus y al vandalismo de las instituciones judías. En algunos casos, condujo a agresiones. Estos acontecimientos se sustentaron en un flujo constante de retórica de activistas antiisraelíes que expresaban su apoyo explícito a organizaciones designadas por Estados Unidos como terroristas, como Hamás, el Frente Popular para la Liberación de Palestina (FPLP) y otras”.

El informe añadió que diez campus representaron el 16 por ciento de todos los incidentes registrados por los investigadores de la ADL, y que la Universidad de Columbia y la Universidad de Michigan en conjunto causaron 90 incidentes antiisraelíes, 52 y 38 respectivamente. La Universidad de Harvard, la Universidad de California en Los Ángeles, la Universidad Rutgers de New Brunswick, la Universidad de Stanford, la Universidad de Cornell y otras completaron el resto de los diez primeros lugares. La violencia, continuó, fue más común en las universidades del estado de California, donde un activista antisionista golpeó a un estudiante judío por filmarlo en una protesta.

La ADL también proporcionó cifras concretas sobre el número de protestas a favor de Hamás que se produjeron en los campus universitarios de todo el país tras el 7 de octubre, un tema que The Algemeiner ha cubierto ampliamente. Según el informe, durante el año académico 2023-2024 se celebraron 1.418 manifestaciones antisionistas en 360 campus de 46 estados, un aumento del 335 por ciento respecto del año anterior.

“Estas acciones incluyeron huelgas frecuentes, con días de acción coordinados en todo el país durante los cuales los estudiantes abandonaron colectivamente las clases. Las sentadas y los simulacros de muerte (cuando un grupo de personas se reúnen y se acuesta como si estuvieran muertas) también fueron populares, junto con manifestaciones y marchas más tradicionales destinadas a llamar la atención sobre las causas palestinas”, continuó. “A medida que avanzaba el año escolar, los activistas sentían cada vez más que las protestas por sí solas no eran suficientes para presionar a las administraciones de los campus para que desinvirtieran en empresas israelíes o se desvincularan de los donantes y grupos ‘sionistas’”.

Estas acciones culminaron con el establecimiento de “Campamentos de Solidaridad con Gaza”, donde estudiantes partidarios de Hamás vivieron durante varias semanas, así como con “ocupaciones físicas de edificios, vandalismo y campamentos de tiendas de campaña en todo el país”. No toda esta actividad era explícitamente antisemita, explicó la ADL, pero una parte significativa de ella sí lo era.

El director ejecutivo de ADL, Jonathan Greenblatt, dijo el lunes que los hallazgos del informe no tienen precedentes y pidió a los funcionarios universitarios que aborden la amenaza existencial que el antisemitismo en el campus representa para la comunidad judía del mundo académico.

“El aumento del antisemitismo que hemos presenciado en el campus no se parece a nada que hayamos visto en el pasado”, dijo Greenblatt en un comunicado. “Desde el ataque del 7 de octubre liderado por Hamás contra Israel, el acoso, el vandalismo, la intimidación y las agresiones físicas violentas del movimiento antiisraelí van mucho más allá de la expresión pacífica de una opinión política. Los administradores y el personal docente deben esforzarse mucho más este año para garantizar un entorno seguro y verdaderamente inclusivo para todos los estudiantes, independientemente de su religión, nacionalidad u opiniones políticas, y deben comenzar ahora”.

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