El secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, expresó sus felicitaciones al primer ministro electo, Benjamin Netanyahu, el jueves por anunciar la formación de un gobierno y dijo que los Estados Unidos trabajarán con Israel “en base a las políticas que persigan, no de las personalidades que formen el gobierno”.
Fuente: ©EnlaceJudío
Hablando en una conferencia de prensa del Departamento de Estado, Blinken dijo que aun así Estados Unidos espera continuar trabajando con Israel. “La Knéset todavía tiene que aprobarlo, como saben, antes de que ser juramentado formalmente”, dijo.
“Pero esperamos trabajar con Israel para promover tanto los intereses como los valores que han estado durante mucho tiempo en el centro de nuestra relación, y también promover un enfoque más amplio para tratar de brindar medidas equitativas de seguridad, de oportunidad, de prosperidad, de dignidad para israelíes y palestinos por igual”.
En medio de algunas preocupaciones acerca de que el gobierno de derecha de Israel ponga en práctica políticas con las que la Administración Biden no estaría de acuerdo, Blinken dijo: “No ha habido ningún secreto sobre nuestro enfoque… En el futuro, al igual que en las administraciones anteriores del lado israelí, en el lado estadounidense, lo que han hecho las administraciones estadounidenses anteriores: nos comprometeremos y juzgaremos a nuestros socios en Israel en base a las políticas que persiguen, no de las personalidades que forman el gobierno”.
Puede ser que no estemos de acuerdo…
Expresó además que el apoyo de Estados Unidos a Israel, en particular a su seguridad, es inquebrantable. “Creo que hemos demostrado durante los sucesivos gobiernos israelíes y las sucesivas administraciones estadounidenses, precisamente porque tenemos una asociación sólida como una roca y comprometida con la seguridad de Israel, que podemos tener conversaciones muy francas cuando no estamos de acuerdo”, dijo. “Eso tampoco va a cambiar”.
Últimamente han aumentado las preocupaciones sobre las políticas de la coalición entrante específicamente relacionadas con los asentamientos, especialmente porque la Administración Biden se ha opuesto a la anexión en Judea y Samaria.
Netanyahu acordó avanzar en políticas para anexar partes de Judea y Samaria (Cisjordania), como parte de un acuerdo de coalición con el Partido Sionista Religioso (RZP), lo que generó preocupaciones sobre la respuesta de Estados Unidos.
Según el RZP, Netanyahu acordó una serie de pasos para fortalecer el control de Israel en el Área C de Judea y Samaria, que está bajo el control militar y civil de las FDI.
Netanyahu aun no ha firmado un acuerdo final de coalición con el RZP y el proyecto de contrato formal entre ellos no se ha publicado.
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