La granada, una de las siete especies de la Tierra de Israel, posee poderosos beneficios para la salud acerca de los cuales hasta hace muy poco tiempo los médicos no tenían ni idea. Esta fruta “con corona” tan exótica llena de semillas con forma de célula y de color brillante como la sangre siempre fue una de mis favoritas pero mi interés en sus beneficios para la salud llegó a su pico hace dieciséis años.

Yo sufría por ese entones de un problemita de salud bastante molesto de sangre privada de oxígeno. Mi médico no se asustó por el problema y me aseguró que se iba a pasar solo “muy pronto”. Pero pasaron varias semanas y todo seguía igual, excepto que cada vez yo tenía menos fuerzas. La sangre alimenta cada célula, cada tejido, cada glándula, cada órgano, y cada sistema en el cuerpo, por lo que a falta de una sangre fuerte y rica en oxígeno, estos sistemas pueden verse afectados, lo cual produce una sensación de agotamiento.

Una mañana, me detuve junto a una juguería en el centro de Jerusalem. Nunca me había pasado algo así antes, pero ese día la mujer que preparaba los jugos me preguntó en forma específica si sufría de algún problema de salud para el cual necesitara una bebida especial. ¡No hay como la Providencia Divina para poner las cosas en marcha! Yo le conté el problema que tenía y ella de inmediato declaró: “¡Por supuesto que jugo de granada – sirve para todos los problemas sanguíneos!”. De inmediato me bajé un vaso enorme de jugo de granada y me llevé otro tanto a casa para beber más tarde. A las 36 horas ya me sentía muchísimo mejor y un par de análisis de sangre que me hice a las dos semanas (durante las cuales continué bebiendo el jugo) demostraron que no quedaban rastros de aquel problema.

Yo me quedé chocha! Sí, es posible que hubiera sido todo una mera coincidencia, pero todas las pruebas señalaban en una misma dirección: la granada! Por ese entonces yo todavía no era una entendida en comida natural pero no hace falta ser un sabio para darse cuenta de que hay algunos alimentos que poseen potentes beneficios para la salud de los cuales los médicos no son conscientes. Recientemente, más y más médicos convencionales empezaron a recomendar el jugo de granada a algunos de sus pacientes oncológicos.

Tres increíbles propiedades curativas de la granada.

Primero, se ha demostrado en estudios clínicos que la granada es el antioxidante más poderoso de todas las frutas. Por supuesto, los antioxidantes son muy recomendados en la lucha contra el cáncer en virtud de su capacidad de bloquear los radicales libres.

Segundo, cada aspecto de este árbol, y en especial la corteza, posee cualidades anti parasíticas, lo cual significa que esta fruta purifica la sangre, que es un principio básico de la salud. El color rojo como la sangre parecería aludir a este rasgo.

Tercero, al parecer la granada posee propiedades muy fuertes anti cáncer de mama. Un estudio publicado hace poco en la revista de la American Association for Cancer Research revela que ciertos compuestos de la granada poseen efectos inhibidores en la proliferación de las células del cáncer de mama.  El aceite de semilla de granada induce la apoptosis, un mecanismo autodestructor de las células de cáncer de mama. El Dr. Efraim Lansky, quien presidió un estudio llevado a cabo por el Instituto de Tecnología de Israel acerca de las propiedades curativas de la granada, explica que: “las granadas tiene la propiedad exclusiva de que las combinaciones hormonales inherentes a este fruto parecen asistir  a la prevención y tratamiento del cáncer de mama”.

¿Esta fruta se merece su corona?

Para obtener el máximo beneficio de esta fruta, coman por lo menos un par de boles de semillas de granada por semana o beban un vaso de jugo de granada varias veces a la semana, cuando es la estación, y complementen con jugo orgánico de botella y extractos de aceite de fuentes confiables, durante el resto del año. (La estación es entre agosto y febrero).

Cuidado! Las granadas pueden interferir con ciertos remedios, por lo que conviene consultar con su médico de cabecera acerca de posibles interacciones farmacológicas.

Pueden visitar el nuevo sitio de Yardena – en inglés- en www.holyhealthiness.com

 O enviarle un mail a holyhealthiness@gmail.com

Fuente: Breslev en español