Un hallazgo arqueológico excepcional considerado de gran importancia histórica fue descubierto en Jerusalem: un segmento de una piedra grabada con una inscripción latina oficial dedicado al emperador romano Adriano, que despiadadamente eliminó la famosa rebelión de Bar Kojba en el año 135 CE. Los investigadores creen que esta es una de las inscripciones latinas más importantes que se han descubierto en Jerusalem.