Fuentes en idioma hebreo indican que el coronel Hassan Sayyad Khodaei estaba implicado en un presunto complot para asesinar israelíes en Colombia, Chipre y Turquía.
El ataque autorizado por el presidente Trump contra el comandante de los Cuerpos de la Guardia Revolucionaria Iraní (CGRI), Qasem Soleimani, logró la neutralización de un sujeto nefasto con sangre americana en las manos.