Una gran explosión sacudió la localidad de Ain Qana, un baluarte del grupo terrorista libanés chií Hezbollah en el sur del Líbano, creando una enorme nube de humo negro, y reavivando los frescos recuerdos de la letal explosión del 3 de agosto pasado que destruyó el puerto de Beirut.

El vocero castrense añadió que el aparato fue monitoreado y derribado por las tropas de las FDI cuando estaba sobre el territorio israelí, sin ofrecer más detalles, y que los soldados estaban rastrillando la zona en busca de los restos de la aeronave.

Fieros enfrentamientos se desataron entre manifestantes y policías en Beirut, días después de la enorme explosión en el puerto de la capital libanesa, que devastó gran parte de la ciudad, dejando aproximadamente 160 muertos y cerca de 6.000 heridos; mientras decenas de personas continúan desaparecidas.

Aproximadamente las 3:30 p.m. de un caluroso 27 de julio, al menos tres integrantes del grupo terrorista libanés chií pro-iraní Hezbollah fueron avistados cruzando la “Línea Azul”, reconocida internacionalmente como la frontera entre el Líbano de Israel, en la zona del Monte Dov, conocida también como las Granjas Shebaa, en los Altos del Golán.

Desde el 2019, el pueblo del Líbano ha sufrido la peor crisis económica y de salud del país en décadas. Los precios de los alimentos, el combustible y los artículos para el hogar se han descontrolado y los civiles tienen acceso limitado a toda necesidad.

"Israel continuará tomando medidas contra los esfuerzos de Irán de afianzarse militarmente en nuestra región. Nasrallah está involucrando al Líbano, debido a Irán.