Las naciones del mundo tienen dificultad para entender el amor que Hashem siente por Su pueblo, Israel. A todas las naciones se les dio la oportunidad de recibir la Torá, pero la rechazaron. Una nación preguntó: “¿Qué dice la Torá?”. Las naciones siguen quejándose: “Y qué pasa si los judíos dijeron ‘Haremos y escucharemos’? ¿Por qué tanta conmoción?”